Mateo

Mateo es un estudioso que ha compatibilizado su vida profesional con su gran vocación: la búsqueda, catalogación y difusión de dólmenes y menhires en la Península Ibérica y Baleares. Dice ultimamente que, si la edad se lo permite, también lo hará en Andorra (que todos sabemos que también es Iberia), más concretamente en el paraje de El Serrat.

Jose Antonio en la entrada del hipogeo de Longar. Viana. Navarra.

La precoz inquietud montañera se mezcló rápidamente con su faceta histórica-arqueológica. Desde 1986 su vida ha sido una continua localización de los megalitos ibéricos en todas sus formas. Los más de 4.000 monumentos encontrados y catalogados desde entonces es un exhaustivo trabajo que hace de él uno de los mayores expertos del megalitismo de España, Portugal y Andorra.

La incorporación de conocimientos arqueológicos a todo su compendio ha sido una combinación de absorción de historiografía junto a un metódico y disciplinado peinado de montes y dehesas: sólo unas docenas de dólmenes y menhires están señalizados en el territorio que, seguramente, posee mayor número de estos monumentos en el mundo. El trabajo de geolocalización de los megalitos ha sido una obsesión en los últimos lustros.

José Antonio Mateo ha podido comprobar, en tantos años de búsqueda, que ser una potencia megalítica sólo presupone superioridad numérica, no conciencia de los que significan esas grandes piedras en nuestra historia. El número de dólmenes que se destruyen o se deterioran cada día es muy superior al que se descubren o que se rehabilitan. Y Mateo ha llegado a otra conclusión determinante: sólo la puesta en valor de dichos monumentos para los habitantes cercanos al megalito podrá preservar la arquitectura humana más antigua de Occidente.

Aunque José Antonio no quiere decirlo, ya que ha decidido coordinar sin mayor reconocimiento ni pretensión comercial toda una labor colectiva que desde hace años se realiza desde el colectivo Dolmenia, queremos sus amigos, colaboradores y socios de Dolmenia, repetimos, Dolmenia, que se consolide, desde su esfuerzo colectivo, levantar la ilusión hacia los dólmenes como lo hicieron sus ancestros luso-galaicos, prehistóricos anteriores a las pirámides, que fueron capaces de poner piedras enhistas en la Península Ibérica que significaban mucho para ellos y para nosotros (desde hace poco): hablamos de la primera arquitectura de Europa.

Contacto en infodolmenia@gmail.com

Mateo y dolmen en Asturias
Todas las piedras se mercen un respeto. Pero éstas las pusieron nuestros ancestos por algo: «¡Piensa, Sancho…y todo este esfuerzo es vacuo!…. No Señor…..Aunque en La Mancha haiga poco de estos piedros, debemos recordar que su trabajo los trujo». Un pequeño homenaje a todos los pedroleros, megalitoistas y sobre todo a tí, neolítico o calcolítico (ya que no tienes nombre), que te lo currastes en nuestra pequeña Península.